lunes, 7 de noviembre de 2016

Nominada al mejor escrito de la semana. Necesito vuestros votos.



Buenas a tod@s. He sido nominada al mejor escrito de la semana en el blog letras y poesía, por favor, os pido vuestro voto, sin ellos sólo quedaré en la nominación, es sólo un clic.
Muchas gracias, sin vosotros no podría conseguirlo.


Os dejo el enlace para que leáis mi entrada de la semana pasada, que es la nominada.

https://letrasypoesiaoficial.wordpress.com/2016/11/07/escrito-de-la-semana-edicion-35/


Lola Sánchez.

miércoles, 26 de octubre de 2016

Entradas en el blog LETRAS Y POESÍA.


Lo dicho queridos seguidores os dejo los enlaces para que leáis las dos entradas que llevo publicada en el blog Letras y Poesía. Os recuerdo que mi primo José Carlos también publica el mismo día, seguro que os gusta muchísimo también y los demás compañeros. A disfrutad de una feliz lectura. Gracias por leedme. Un gran abrazo para tod@s.





https://letrasypoesiaoficial.wordpress.com/2016/10/25/te-esperare-2/

https://letrasypoesiaoficial.wordpress.com/2016/10/18/insomnio/


LOLA SÁNCHEZ.

ESCRITORA DEL BLOG INTERNACIONAL LETRAS Y POESÍA


Queridos seguidores hoy tengo una gran noticia. Hace unas semanas mi primo, José Carlos Mena Sánchez que muchos de vosotros conoceréis, me comentó que participaba como escritor  en un blog internacional de escritores noveles y que merecía la pena que yo lo intentara, ya que estaban buscando a nuevos colaboradores. El blog como veréis es de gran calidad, y formar parte de él es todo un privilegio. Participo cada semana concretamente todos los martes, curiosamente comparto ese día con mi primo. Así que espero que nos leais, y que disfrutéis mucho de nuestra compañía y de las letras de todos mis compañeros de plantilla. Estoy segura que os engancharéis sin poderlo evitar. Este rinconcito no lo dejo, sólo que os iré poniendo mi aportación semanal al blog:

“ LETRAS y POESÍA  literatura inédita, distintas posturas”

https://letrasypoesiaoficial.wordpress.com/

https://letrasypoesiaoficial.wordpress.com/


LOLA SÁNCHEZ



lunes, 15 de agosto de 2016

A que no me dejas...



Tras meses de lucha interna las tinieblas mentales se desvanecieron. El intento de alejarse y sumergirse en el abismo más negro quedó atrás. Y todo gracias a él. Su presencia silenciosa, sus ojos de mirada honesta, sus enormes manos, aunque entumecidas, sangrantes, jamás la dejaron caer. Soportó toda la inconsciencia. Todo el lado más siniestro y oscuro que pueda albergar la propia naturaleza dual de un ser humano. Lo hizo porque le salió de lo más profundo de su ser. No podía ser de otra forma pues sólo los que tienen el corazón en llamas pueden lograr esa proeza. Y el suyo estaba despierto y latente por el amor verdadero. Ella estuvo cegada por un espeso velo y él estuvo siempre a su lado. Hubo momentos que ella no se dejaba ayudar, momentos donde otro la hubiese dejado aislarse hasta autodestruirse. Él la estuvo apoyando como una roca firme en medio de una terrible tempestad. Lo que sentía por ella era tan grande como el mismo cosmos. Persistente, insistente, paciente hasta la extenuación. Demostró una fortaleza infinita. Todo eso la hizo volver. Mirar más allá de su mente limitada y desequilibrada. Sentir de nuevo su propia alma, que todo lo conoce y lo sabe. Descubrir que lo que parecía muerto renacía de nuevo. 
Dispuesto a retenerla la fue reconquistando, transformando y diluyendo todo su dolor pasado. Y como si de una flor que se cerró por el frío invierno, ella volvió a abrirse recuperándose. Su oculta sonrisa emergió y sus ojos llenos de tristeza volvieron a brillar manifestando su auténtica identidad.  



  © LOLA SÁNCHEZ

viernes, 5 de agosto de 2016

DEJARLO IR...



Maria, le había escrito aquella noche por última vez. Su frase había sido contundente, un se acabó que la rompía por dentro. Aunque más duro era continuar con una situación que la arrastraba a la noche mas oscura del alma. El mundo los separaba, las circunstancias los separaba y ni él había sido tan valiente como ella se creía y ni ella tan decidida como aparentaba. Se habían quedado sin fuerzas, ambos habían esperado demasiado y como todo lo que se alarga mucho termina por pasar de largo, como el tren que no espera y parte hacia su estación de origen. 
Él no volvería a buscarla, ni a llamarla, no volvería a escribirle aunque se muriera de ganas de saber de ella... Sólo esperaba que algunas de sus palabras, de esas que salieron de su más profundo ser ella las recordara. Ambos rompían, desgastados, cansados de esperarse el uno al otro. Los reproches, la distancia, la incomprensión, el entorno, todo, se había confabulado para separarlos. Y no podían hacer nada, sólo aceptar esa ruptura con la misma fuerza del huracán que los dejó locos de amor. Y mientras ambos se alejaban. Ella leyó de nuevo las palabras que él le escribió en su momento "Podrás buscar donde sea, buscar y buscar,  y hagas lo que hagas, decidas lo que decidas, por mucho que busques, sabes que nos perteneceremos para siempre" y sabiendo que esas palabras eran verdaderas el sonido de la ruptura fue como un terremoto que abrió la tierra donde ambos pisaban. Y ambos alzaron sus alas para volar libres. 




© LOLA SÁNCHEZ

jueves, 4 de agosto de 2016

Noches de Bohemia


Noches de Bohemia

Aquellas noches donde sólo el roce de las pieles sin tocarse, las risas en un espacio que flotaba entre nubes, llamadas interminables enganchados al teléfono. Noches de Bohemia y de pasión, que se quedaron forjadas en filigrana en sus almas. Elena recordaba cada palabra de él. Era como estar en un estado alterado de conciencia que la arrastraba a la locura. Él se había convertido en una obsesión no lo podía olvidar, por mucho tiempo que pasara, por mucha distancia que hubiera. Soñaba despierta con encontrárselo de nuevo, con poder mostrarle lo que llevaba guardado en su corazón para él. 
José Luis la amaba cada madrugaba en silencio, miraba su fotografía y recordaba aquella noche que probó sus labios fundiéndose todos sus sentidos, y ella lo había olvidado, su silencio le dolía pues podía llamarlo por lo menos para saber como estaba, se refugiaría en su pasión y guardaría esos sentimientos, o mejor, los ocultaría, los sepultaría de tal forma que ni el mismo pudiera dar con ellos.
Ambos cada madrugada se salían de sus cuerpos y repetían aquella noche de bohemia que los unió para toda la eternidad... Mientras en el mundo ordinario cada uno seguía su camino, ambos pensaban que sólo fue un momento sublime en sus monótonas vidas, ambos pensaban que sólo fue una ilusión caprichosa del destino. "Él nunca me amó", pensaba Elena decepcionada. "Jamás le importé, sus besos fueron falsos" pensaba él lleno de amargura. Y más allá del pensamiento ,de la mente pequeña, durante cada madrugada, ambos salían de sus cuerpos para amarse con el alma y repetir aquella noche de amor verdadero.



© LOLA SÁNCHEZ



miércoles, 27 de julio de 2016

INTENTAR DE NUEVO



Miraba las vías de la estación. Volvería a subir aquel tren, regresaría a verla aunque todo estuviera perdido. Intentaría de nuevo que todo fuese como antes, donde sólo la alegría interna alumbraba las circunstancias. Dónde en cada amanecer se era plenamente consciente del regalo de nuevas oportunidades. Intentaría no volverse alejar de ella, no caer en el estío de la monotonía, no permanecer a su lado y en realidad estar en un lugar lejano e inaccesible. Abrir de nuevo su corazón, para entregarlo sin reservas, sin miedos, sin misterios y ocultaciones. Volvería a ser él, o quizás alguien mejor, más pulido y brillante. Inseguro, sin saber si sus intenciones le podían llevar a buen término, subió al tren, con la esperanza de besar sus sedosos labios, con las ganas de su adolescente interior de hacerla feliz en cada momento, de amarla cada noche y cada instante de su vida.



© LOLA SÁNCHEZ

domingo, 17 de julio de 2016

RENACIMIENTO




Volver a renacer, es algo que todos hacemos alguna vez en la vida. Renacer puede costar trabajo, incluso como los partos puede estar lleno de dolor, y de alivio a la vez. Sé bien que nos vamos transformando en cada etapa de la vida, y en ocasiones esos cambios van llenando de suciedad lo que en realidad somos. Otras veces llegan nuevas personas a tu vida, personas que llenan el alma como un hijo, y te vuelcas en su mundo haciéndolo propio. El caso es que hay momentos de retiro, momentos donde te pierdes en la inmensidad, quizás porque encontraste tu propio reflejo y lo que te mostró fue un lado siniestro de ti mismo, aún así la oscuridad hay que iluminarla. La experiencia de los años vivido solo me demuestra que hay que volver a casa, y nuestra casa no es un hogar físico, es algo que perdura y siempre está sin cambio, inmutable e inmortal. Ese lugar al que me refiero habita en cada uno de nosotros. Hace ya seis años que tuve la crisis más grande de mi vida, y descubrí que todo lo que necesitamos saber, no está fuera de nosotros, no depende de nada y de nadie externo, físico. Descubrir que todo absolutamente todo está dentro de uno, y que la paz interior es la clave para afrontar cualquier obstáculo que se te presente en la vida, fue un descubrimiento que me cambió mi forma de entender el mundo que me rodea. No es nada fácil, saber y sentir que tu verdad, la tuya, y que el AMOR de verdad está en lo más profundo de tu corazón que es la frontera que linda con el alma, ese fuego que hablan los míticos puede expandirse, iluminándote e iluminando a tu entorno. Y sin embargo la vida te pone pruebas, donde tu mente se impone a tu corazón, o donde no hay un acuerdo entre lo que sentimos y lo que pensamos, entramos en conflicto con nosotros mismo, y nos aislamos, o hacemos daño a las personas que amamos de forma inconsciente. Y aunque hayas logrado descubrir la verdad, encontrarte con personas o circunstancias que tuvieron la capacidad de tambalear tu propio mundo, y que hicieron que te replantearas todo tu universo es una de las pruebas más dura que se te pueda presentar en tu vida. Y como siempre la respuesta y la solución están dentro. El retorno a casa, volver a tu esencia para de nuevo nacer.

De nuevo me tendréis por aquí en este nuevo renacimiento, pues la escritura es la mejor herramienta para sanar, y para sumergirme en mi auténtico hogar interior, es ese espacio del espíritu que  comparto con aquellos que deseen darse una vuelta por sus habitaciones. Regreso a mis orígenes. Gracias por esperarme en este retiro.



© LOLA SÁNCHEZ